El negocio de las agendas vuelve a estar en ascenso. Las tiendas se llenan de planificadores y las librerías exhiben decenas de organizadores con motivos ejecutivos, artísticos y, sobre todo, positivos. Pero normalmente una misma agenda no sirve igual para un empresario que para un escolar. Ahí es donde la marca Abiebrown juega a ganador porque, tras 6 años de trabajo, la compañía española se transformado en la líder indiscutible del mercado, diferenciándose a través de la personalización de las agendas y planificadores Abiebrown, que se realiza de forma online en su web.
Ana Martín y Carolina Juan son las dos creadoras de esta empresa de papelería creativa y son las responsables de que miles de personas hayan encontrado la mejor forma de organizar tareas, eventos, notas… todo con un diseño que no pierde su forma clásica y la comodidad de una buena planificación. Con multitud de opciones disponibles para trabajo, estudio, salud y personal, son un gran ejemplo de cómo triunfar online a base de tesón, trabajo y buen hacer.
¿Qué hizo que os decidierais a emprender?¿Cómo se os ocurrió la idea para poner en marcha vuestra empresa?
C: Nosotras nos conocimos en la universidad ya que estudiamos las dos Publicidad y Relaciones Públicas, hicimos prácticamente toda la carrera juntas y la verdad es que nos complementamos bastante bien a la hora de trabajar. Una vez terminamos la carrera y vimos que las salidas laborales no se ajustaban en nada a lo que esperábamos en nuestro ámbito, nos sentamos y empezamos a darle vueltas a qué podíamos hacer. Intentando encontrar el que, nos dimos cuenta que la papelería a ambas nos volvía locas.
A: Cuando comentamos que teníamos esta idea de negocio, lo primero que te dice la gente es «¿en el mundo de la tecnología te metes en papelería? No, papelería no…«. Pero al final nos dimos cuenta que si es algo que nos gusta, que nos apasiona, da igual lo que otros piensen o digan, tú le vas a dedicar todo tu día algo que te gusta y al final el resultado se va a ver.
C: También es curioso porque las dos teníamos antecedentes ya relacionados con el mundo de la papelería, del papel de imprenta. Mi padre, por ejemplo, tenía una papelería física aquí en el barrio donde vivimos y el padre de Ana también trabaja en un departamento de imprenta. Nos hemos criado desde pequeñas en este mundo, con el olor del papel, el olor del cuaderno recién comprado, era algo que teníamos en común y que sabíamos que nos iba a gustar. No teníamos muy claro cómo lo íbamos a enfocar y está claro que lo hemos ido readaptando desde el principio, hemos tenido muchas trabas en el camino que nos han ido haciendo pivotar la idea, pero que íbamos a emprender en el sector de la papelería lo teníamos claro.
¿Cómo seleccionasteis los productos con los que empezar el negocio?
A: Al principio buscamos el producto más básico que pudiera lograr que lo comprara el mayor número de personas. Ahora tenemos casi 1.000 productos en la tienda, pero al principio en lo que pensamos fue en que si vas a ir a comprar artículos de papelería, algo que usa la mayor parte del público es una agenda. Creamos una agenda lo más básica posible con un contenido muy sencillo (ahora tenemos contenido específico para profesorado y docentes, para organización de dietas como menús semanales, para estudiantes, para profesionales que tienen que organizar eventos y reuniones, gestión de stock…) pero al principio el contenido era muy básico: era una agenda para organizar la semana, con hojas de notas y un calendario mes a vista, para intentar llegar a la mayor cantidad de público posible con el presupuesto inicial que teníamos, claro.
C: Una de las mayores trabas que nos encontramos fue dar con un producto totalmente acabado de fábrica, es decir, que nosotros no tuviéramos que manipular dentro de nuestro presupuesto, eran costes demasiado elevados porque las cantidades de productos que pedíamos eran muy pequeñas. Eso fue lo que nos llevó a decir, «vale, pues lo hacemos nosotras», con idea de que fuera así solo al principio, lo que pasa es que al final se ha convertido en nuestra diferenciación.
Cuando decidimos que lo íbamos a hacer nosotras mismas, nos planteamos cómo empezar el primer año sin que nos conociera nadie porque éramos tienda online, no teníamos un escaparate a pie de calle que permitiera a quien pasase por delante el ver nuestros productos y conocerlos de primera mano. ¿Cómo haces para empezar y que no te caduquen las agendas? Porque al final las agendas llevan unas fechas, unos calendarios determinados y demás, así que pensamos que lo mejor sería hacer agendas sin fechas para que cada uno las fuera poniendo según fuera usando la agenda.
Nosotras les ponemos los calendarios al principio de la agenda, pero luego las páginas no van fechadas si no que llevan un apartado para que cada uno le ponga la fecha que corresponda. Y de ahí nació nuestro primer producto, bajo el paradigma de que fuera algo muy básico, muy abierto, algo que de alguna manera se pueda ir confeccionando, que no pierdes contenido cuando lo recibes porque está en blanco y tú le pones la fecha de inicio. Eso fue la base y nos hizo darle la vuelta a todo lo que teníamos en mente: lo tenemos que fabricar nosotras, pues para que no se nos queda un stock grande y una inversión importante hecha de agendas que caducan vamos a hacerla sin fechas. También teníamos la idea de que ese prototipo base fuera como una herramienta de trabajo muy importante, es decir, ofrecer una agenda básica de trabajo que se fuera a ir adaptando por sectores o por distintos temas de contenido, de forma que en una agenda lo lleves todo y no tengas que andar con dos tres cuadernos (uno para trabajo, otro para la vida personal…), teníamos claro que queríamos que fuera una agenda más allá de lo tradicional.
¿Hicisteis un plan de empresa u os formasteis de alguna forma antes de empezar?
A: Yo estuve en un programa de emprendedores para montar startups y sí que me llevé de allí la sensación de la motivación personal de llevar a cabo tu proyecto, pero aparte de eso, todo lo demás lo hemos aprendido mediante prueba y error en estos 7 años, buscando por internet, haciendo tutoriales, apuntándonos a cursos… Ha sido todo autodidacta. Sí es verdad que como veníamos de la Publicidad teníamos unas bases de marketing o un poquito de idea que te ayuda a hacer el tema de la publicidad en las redes sociales, pero claro, cuando nos metemos en la programación web, por ejemplo, o en edición de vídeo y audio, que no teníamos ni idea, pues nos lanzábamos a la piscina.
¿Con qué apoyo personal y/o profesional contasteis?
C: Sí que tuvimos claro desde el principio que iba a ser una decisión en la que no íbamos a involucrar a nuestro alrededor, sobre todo en cuanto a las inversiones económicas que había que hacer porque claro, al decidir fabricar a mano teníamos que comprar la maquinaria y los materiales iniciales para empezar. Queríamos que fuera un ensayo y error nuestro, llegar hasta donde pudiéramos llegar, que si luego llegaba un momento en que se estancara y no funcionara, bueno, pues habíamos asumido el riesgo nosotras sin involucrar a nadie más.
Entonces, en ese sentido nos apoyamos la una de la otra, pero sí que es verdad que tampoco es que pidiéramos permiso en el sentido de contar con apoyos emocionales de la familia, amigos o pareja para que nos confirmaran lo que nosotras ya queríamos hacer. Tomamos la decisión de que íbamos a probar y nos lanzamos, con la idea de que si realmente no funcionaba, pues no funcionaba, pero sí que es verdad que todo el mundo a nuestro alrededor ha estado ahí, no habido nadie que nos haya intentado quitar la idea de la cabeza, que nos haya dicho «vas a p
erder dinero, te vas a arriesgar…«, no, realmente ha sido positivo, no sé si para sorpresa nuestra o no, porque claro, mis padres habían tenido una papelería y cuándo empezaron las grandes superficies, también las tiendas chinas, han hecho muchísima competencia al sector y muchísimos negocios han tenido que cerrar. Mis padres sí que tenían ese miedo de haber tenido que cerrar en el mismo sector, pero no tenían ni idea de las posibilidades y el potencial de internet, en el que puedes vender a cualquier punto de España, del mundo, a cualquier hora del día, en fin de semana… Tampoco quisieron quitarme la idea porque no conocían este mundo online y además creían en mis posibilidades, supongo que también pensarían que si me tenía que equivocar, pues me tendría que equivocar. Pero sí es verdad que a lo largo de estos años que tiene el proyecto las dos hemos tenido mucho apoyo por parte de nuestro entorno
¿Contáis con algún tipo de financiación o inversión?
A: Lo hemos autofinanciado todo y ahora estamos en un punto en que se reinvierte sola la empresa. Desde el principio decidimos que no queríamos contar con ningún tipo de financiación externa, ni siquiera puntualmente de bancos, hasta donde se llegue se llega, y ahora ya no hace falta.
¿Qué es lo que más os costó al arrancar tu proyecto?
A: Nos dijeron muchos «no» al principio, porque empezamos muy jóvenes, teníamos 23/24 años y nos veían como unas niñas pequeñas que querían «jugar». Íbamos a fábricas a pedir presupuesto y, a parte de que en muchas directamente nos cerraban la puerta sin ni siquiera escucharnos, en otras agendamos reuniones con el jefe para hacer presupuestos y ni se presentaba. Creo que al principio lo más duro fue no ya el que no confíen en ti si no el que no fueran serios, eres mujer, no mujer, 23 años, 29 años, da igual, escúchame porque te estoy trayendo negocio, quiero cerrar un contrato contigo. Yo creo que ése fue el mayor freno de todos, el que nos cerraran puertas porque sí, sin escuchar.
C: También fue bastante duro empezar con la incertidumbre de cuándo llegará la primera venta, cuando no te conoce nadie, de no saber cómo llegar a la gente, no saber cómo hacer publicidad en redes sociales ( además la publicidad por aquel entonces estaba
también en beta, se estaban empezando a desarrollar las herramientas para hacer publicidad ). No lo controlábamos porque no lo habíamos hecho nunca, no sabíamos cuándo iba a llegar la primera venta fuera de nuestro círculo de conocidos… porque sí que es verdad que nos apoyaron primero el entorno (los amigos, familiares y demás) pero no íbamos a sobrevivir solo con eso, la incertidumbre de no saber qué más podíamos hacer para llegar. Al final se trató de creer y confiar en lo que estábamos haciendo y no dejar de comunicar, que nos vieran aunque no tuviéramos los contenidos muy desarrollados, que vieran que estábamos en preparativos, que acababa de llegar material, que teníamos las máquinas listas, que estábamos preparando bocetos… todo eso lo comunicamos. Antes de tener incluso el primer prototipo de agenda estábamos comunicando todo con la página de Facebook, las primeras publicaciones eran bocetos en papel, las primeras herramientas, y empezamos así.
¿Contáis con empleados?
A: Somos nosotras dos solas, lo que hemos ido haciendo largo de estos 6 años es externalizar todo lo podemos. Por ejemplo, al principio comprábamos lo que son los separadores de la agenda, compramos nosotras las planchas y aquí se guillotinaban a medida, eso ahora ya lo externalizamos y nos viene ya todo cortado. Intentamos externalizar todos los procesos que a nosotras ya no nos aportan, intentamos dar mucho más trabajo a las imprentas y los encuadernadores para nosotras quedarnos con el trabajo más de comunicación,
¿Cómo seleccionáis a vuestros proveedores y colaboradores? ¿Tenéis alguna metodología o buscáis algo en concreto?
C: Como todo está hecha a mano intentamos que seas locales, primeramente que sean de España, sobre todo porque hay muchos artesanos muy buenos en su trabajo y realmente todo ese trabajo se está perdiendo con la tira de fábrica que hay actualmente. También para posicionarnos en la marca España, nuestros productos están fabricados aquí. También que trabajen con materiales sostenibles, es decir, que todos los materiales (cartones, papeles, etc.) que utilicemos tengan la etiqueta Ecolabel, con certificado FSC proveniente de bosques sostenibles, porque ya que vamos a hacer algo en papel que sea lo más ecológico posible. Ya que estamos dando ese valor al trabajo en papel, a la escritura a mano, que al menos sea lo más sostenible posible. Al final el conjunto da una mayor calidad, porque el producto es más duradero. Cuando te fijas y valoras todos esos puntos, que al final también encarecen el producto (porque fabricar en España realmente lleva un coste adquirido), valoras que sea un producto de calidad que te vaya a durar todo el año de uso de ese cuaderno, en las mejores condiciones posibles. Resumiendo, yo diría que sean productores locales (tanto encuadernador como imprenta y demás), y luego que trabajen con materiales sostenibles.
¿En qué medida esos colaboradores han sido decisivos en el éxito de la empresa?
A: Bastante, porque al final vendemos un producto físico y dependemos de que todos nuestros fabricantes nos echen una mano cuando hay rotura de stock, para que nos envíen stock nuevo lo antes posible. No hay que olvidar que si tenemos una rotura de stock de tapas, por ejemplo, esas tapas se hacen a mano, es una persona que corta todos los materiales, los encola, los dobla… poder contar con alguien que de la noche a la mañana nos envíe una caja de 200 tapas rosas porque se nos han acabado, y nos las envíe porque se ha quedado toda la noche trabajando para enviarte esas tapas rosas, eso es imprescindible. De hecho hemos dejado de trabajar con colaboradores porque, aunque el trabajo que hacían al final era muy bonito, ése tipo de relación no llegábamos a tener tenerla y al final hemos optado por gente en la que podemos confiar que en un momento puntual, en temporadas altas, sabemos que están ahí, que no nos cierran la persiana, se van de vacaciones y se olvidan de nosotras. Al final yo creo que es buscar colaboradores que, dentro de sus materiales y procesos de producción, estén en sintonía con nuestros valores y también tengamos esa afinidad personal y emocional de llamarles un día y decir «no me quedan…envíame todo lo que sea, por favor«. Es al final remar todos en el mismo barco.
C: Además no es solo como cuando tienes un empleado, que se nota cuando es eficiente porque cree en el proyecto. Nosotras también hemos llegado a ese punto con los proveedores que tenemos actualmente, porque hemos pasado por profesionales que realmente no han tenido ese compromiso, no ha habido esa afinidad que tenemos con los proveedores actuales, y en los momentos en los que los hemos necesitado de verdad han priorizado otras cosas por delante nuestra. Cuando al final terminamos siendo clientas para todo el año, es fundamental que los proveedores se comprometan a estar ahí porque es un trabajo seguro para ellos todo el año también. Es encontrar proveedores que se comprometan también con tu proyecto.
¿Consideráis que el modelo de negocio de vuestra empresa es (o puede llegar a ser) muy rentable?
A: Sí, al final cuando fabricas un producto físico siempre vas a trabajar con los márgenes de ganancia, llegado al punto en el que podemos fabricar estas cantidades sin dedicar tantas horas al día, es como que el negocio funciona solo.
C: También sin la necesidad de tener que adquirir un crédito porque no llegas Hemos aprendido también a mejorar procesos para que realmente podamos estar todo el año con esa reinversión.
¿Habéis tenido algún problema de escalabilidad?
A: Hasta la fecha no, quizá al principio porque no teníamos presupuesto, te piden un mínimo de compra al principio y no tienes para hacerle frente. Nos pedían por ejemplo una compra mínima de 5.000 agendas, teníamos un presupuesto y lo teníamos que invertir solo en ese material, no nos daba para el resto. Teníamos que negociar mucho con el proveedor, pero ahora, en este momento, ya no.
C: El confinamiento fue duro también, pero generalmente las situaciones extraordinarias es lo que tienen. Los meses previos al confinamiento también fueron raros por la situación general.
De cara a crear una buena cartera de clientes, ¿qué estrategia recomendaríais adoptar?
A: Nosotros siempre optamos por la transparencia, cualquier persona que quiera acercarse a nosotras o a nuestro negocio, cualquier cosa que nos pregunte, la respuesta es: «esto es lo que hay y así es como se hace«. No merece la pena intentar conseguir clientes a base de mentir o de engañar, o de dar datos que no son reales. Al final la mentira siempre se descubre y los mejor es contar lo que hacemos y si al cliente le gusta, fabricarlo para él. Intentar engañar con los precios o con las calidades, es que no merece la pena. Lo mejor, la transparencia, es algo que a nosotras siempre nos ha funcionado.
C: También trabajamos mucho la fidelización, nosotras cada albarán de cada pedido lo firmamos a mano, ponemos un agradecimiento, realmente estamos agradecidas de que hayan confiado en nosotras y nos hayan comprado productos para su planificación, realmente deseamos que les resulten útil todo el año. También premiamos al cliente recurrente, al que vuelve a comprar siempre le incluimos un detallito en el paquete, una sorpresa porque realmente no lo saben ni lo anunciamos, pero sí que tenemos un detalle con cada cliente que vuelve a confiar en nosotros comprando para el siguiente año.
Si alguien quisiera empezar un negocio como el vuestro, ¿qué tres consejos le daríais?
A: La paciencia es uno, que sean pacientes porque todo llega, que amen lo que vayan a hacer porque al final van a tener que estar muchísimas horas (más de las que cualquiera se piensa) con el proyecto, entonces que cualquier cosa que vayan a hacer lo amen de verdad y lo disfruten como si fuera su hobby.
C: Y yo diría también que se cuiden a sí mismos para estar a tope, porque después emprender lleva mucho desgaste, entre todas las horas que dedicas al negocio, el tiempo que dejas de hacer cosas personales (que es tiempo que necesitas para descansar y liberar la mente), y el tiempo de descanso que te quitas porque te sientes culpable de estar descansando, porque estás perdiendo el tiempo (y realmente es todo lo contrario)… Entonces cuídate a ti mismo para poder estar al 100% en tu proyecto.
Hablando de la vida personal, ¿podríais detallarme cómo sería un día cualquiera en vuestra vida?
A: A mi por ejemplo me gusta levantarme bastante pronto, soy de madrugar, lo primero que hago siempre sentarme a ver qué ha ocurrido en el negocio: si hay emails, si hay incidencias, si ha pasado algo, ése tipo de gestiones de gente que han recibido el producto, o les ha llegado roto. Ése tipo de gestiones son las que más me agobian, intentamos siempre que el cliente esté agusto. Luego por la mañana siempre intentamos montar los pedidos porque a las 14h viene el camión de Correos a llevarse los paquetes. Comemos publicando en las redes sociales, sobre las 16h volvemos a contestar pedidos, a hacer gestiones y a montar pedidos hasta las 20:30h o 21h, que cerramos la oficina y nos vamos a casa, pero seguimos comentando asuntos del negocio por Whatsapp.
Tenéis poco tiempo libre, entonces. ¿Cómo lo gestionáis?
C: También es verdad que tenemos temporalidades no sea, por ejemplo en la época del año en la que ya ha pasado la campaña Navidad estamos un poquito más tranquilas y sí que es verdad que puedes sacar más tiempo, pero luego llega la vuelta al cole y es imposible, porque también el producirá mano lleva sus tiempos. En un momento dado empezará a entrar un mayor volumen de pedidos y vuelta a empezar. Realmente se reduce bastante el tiempo personal porque luego también te tienes que dedicar a todo lo que nos preparar pedidos. Cuando añades ese tiempo de ordenador, de gestión de la tienda, de contestar emails… hay épocas que son más difíciles que otras. Los fines de semana intentamos desconectar, porque si no hay veces que llega un momento que la saturación es tan grande…
A: La saturación es tan grande que te terminas poniendo malo.
¿Cuáles son vuestros hobbies? ¿Tenéis alguna afición?
A: A mi me gusta mucho leer manga, es mi momento de desconexión.
C: a mime gusta mucho dibujar láminas, lo que es lettering o dibujar con rotuladores de caligrafía y demás, y me gusta también mucho trabajar el scrapbooking, al final sigues trabajando en papel pero con papeles decorados para hacer álbumes, etc. Lo encuadernas tú a mano… porque al final el trabajo de encuadernación de las agendas sí que nos viene hecho, pero a mi me gusta mucho también hacerlo yo para regalo, me gusta muchísimo pensar en la persona a la que se lo voy a regalar.
¿De qué manera ha afectado el desarrollo del negocio a vuestra vida familiar?
A: Yo tengo la suerte de que mi pareja es igual que yo, en ese sentido nos entendemos muchísimo porque sé que cuando está metido en un proyecto está solo a eso y lo entiendo, y en ese sentido tengo la suerte de que me entiend. Tener una empresa significa estar pendiente de ella prácticamente todo el día y es cuestión de buscar huecos en los que ambos estamos libre. Casi hay que hacer un Google Calendar conjunto para cuadrar horas para hacer cosas juntos 🙂 Es buscar la complicidad en esos ratitos libres y que tu pareja entienda que eres emprendedor y que tienes una empresa que te quita casi todo el día.
C: Por mi parte menos mal que son bastante comprensivos, ha sido un proceso de adaptación también, cuando ya han conocido el proyecto desde dentro y lo han visto crecer desde el inicio han ido comprendiendo todo mi alrededor todo lo que se venía, pero sí que es verdad que intento reservar un momento para ellos también, tanto para los padres como para mi pareja, esos ratos libres los dejo más para el fin de semana. Entre semana sí que intento respetar el momento de la comida con ellos porque también es el momento de desahogo para todos, poner todos cosas en común y es sagrado, ese momento de comer con ellos, hablar y expresarte. Pero sí que los fines de semana intento darles tiempo a cada uno para poder disfrutar de todo.

¿Qué es lo que os motiva para seguir adelante?
A: Yo creo que el hecho de que tenemos todavía muchas cosas por sacar y muchos proyectos en mente, que a pesar de que la web tenga mil productos todavía tenemos tantísimas ideas y cosas que queremos hacer, que siempre queremos más. Al final, como nos gusta tanto lo que hacemos (es también un hobby), yo creo que eso es lo que nos hace seguir, el que tenemos muchas cosas por hacer
C: Yo iba a decir lo mismo, es que es un hobby, realmente hay cosas que te gustan más y cosas que menos, cosas que controlas más y menos, pero es muy versátil a la vez. La comunidad que hemos creado nos da mucho feedback, y ese feedback muchas veces son ideas nuevas: «¿Por qué no adaptáis este producto así? ¿O le dais este giro? O esto que está funcionando muy bien lo podéis adaptar vosotras también…» Entonces, entre las ideas que nos dan y las que vamos trabajando nosotras que nos gustaría hacer, nos da para años, lleva tiempo poner en marcha todo esto y realmente lo vemos viable. Hemos creado un proyecto de papelería que se sale un poco de lo tradicional (a pesar de que el proceso sí que es tradicional) de fabricación del producto pero en ideas de adaptación y de personalización (en la que nos hemos focalizado mucho) vemos que tenemos muchísimo aún por desarrollar. Es la motivación de saber que no te quedas estancada ni sin ideas, que esto va evolucionando.
¿A qué personaje histórico os hubiera gustado conocer y por qué?
C: Yo lo tengo muy claro.
A: ¡Tu lo tienes clarísimo!
C: A Isabel la Católica, la reina, porque me parece una mujer con un temperamento para la época que era, un poder de decisión seguro y firme que me encanta. Pero sobre todo para la época que era, poder reinar una mujer me parece increíble. Y lo claro que tenía que la reina de Castilla era ella, y era ella la que impartía justicia. Como modelo de mujer me parece un personaje muy interesante.
A: A mi no se me viene nadie a la mente ahora mismo.
Si tuvierais que pensar en la figura que más os ha inspirado, ¿quién sería y por qué?
C: Isabel me inspira mucho porque reinó hace cuatro (casi cinco) siglos y me parece muy adelantada su tiempo, con un gran temperamento y tesón, que es el tesón también del emprendedor, decir «quiero de hacer de mi proyecto, que es crear un reino, un icono de muchos reinos, voy a trabajar por eso todo mi vida para conseguirlo«. En el sentido del emprendedor es que voy a trabajar toda mi vida para conseguir que mi proyecto salga adelante y que pueda crecer, entonces, a diferentes escalas sí me inspira.
¿Hay algún libro que os haya inspirado?
A: a mi me gustan mucho los libros de autoayuda porque creo que es súper importante parar y empezar a reflexionar. Uno de los últimos libros que más me ha hecho parar y pensar es Nada es tan terrible, de Rafael Santandreu, te hace ver que los agobios que tienes durante el día, que a veces te afectan incluso de manera física poniéndote malo (no le ha llegado el pedido a un cliente, hay un problema con el proveedor, no va a llegar el material a tiempo…), no son tan importantes ni se acaba el mundo. Me abrió los ojos, no hace falta que te pongas malo por la empresa, termina la jornada y mañana será otro día.
¿Qué palabra definiría mejor vuestra actividad como empresarias?
C: Constancia, porque yo creo que en el momento que empiezas a desarrollar tu proyecto tienes que creer en él y aunque los resultados tarden en llegar, como por ejemplo nuestro caso la primera compra de alguien desconocido, ese creer y esa constancia va a hacer que no tires la toalla, que sigas trabajando en acciones de comunicación, de visibilidad, de llegar a tus clientes, de intentar cosas diferentes, eso es lo que va a hacer que tú no desistas en este camino. Creo que la constancia es uno de los valores más importantes a la hora de emprender.
Con todo lo vivido estos años, ¿qué creéis que es lo mejor de ser empresarias?
A: El poder llevar a cabo tus ilusiones y tus sueños. El poder hacer realidad algo que a ti se te ha ocurrido, en cualquier ámbito. A mí me apasionaba el poder modificar una libreta, porque me compraba las agendas y las veía tan estáticas y tan aburridas, no se adaptaban a mí, siempre imaginaba un sitio donde yo hacía mi agenda medida y el poder hacer esto realidad creo que es impresionante. Todos tenemos sueños, todos tenemos ideas en cualquier ámbito y el poder hacer eso realidad creo que no tiene precio.
C: Yo creo que también la autogestión tuya como persona. Tú eres tu propio jefe y eso tiene sus pros y sus contras porque no tienes a nadie más que te vaya a solucionar los problemas, pero tú te autogestionas porque hay días y días, hay días que eres más productiva en un tipo de tarea, hay otro día que estás más inspirada para crear… El saber encontrar un momento para cada cosa sin tener un planning impuesto por otra persona que cumplir sí o sí, el saber tú dónde diriges tus atenciones y tus esfuerzos en cada momento.

¿Cuál ha sido el episodio más gratificante que habéis vivido como empresarias?
A: Yo tengo muchos momentos guardados de esos que los recuerdas y te emocionas, porque claro, hemos pasado por multas etapas en el negocio en estos años. Recuerdo por ejemplo la primera vez que vino un camión a descargar material a la puerta de las oficinas, ver a los chicos con los elevadores bajado el material, eso fue impresionante, además tenemos una foto las dos arrodilladas con el camión detrás, eso no se me olvidará nunca, pensé que esto ya era de verdad. Estábamos acostumbradas a pequeños repartos y ese momento en el que de repente la empresa da un salto tan grande y lo ves llegar, ese día no se me olvidará. De hecho, llamé a mis padres que trabajan cerca y vinieron los dos, todo para decir «¡ese camión es nuestro!«. A mi eso no se me va a olvidar nunca.
C: Yo tengo dos. Uno fue el primer aluvión de ventas que correspondió a la primera vuelta al cole que vivimos. Sacamos un diseño nuevo de cuadernos la última semana de agosto, apurando para la vuelta al cole, con la intención de lanzarlo y ver qué pasaba. ¿Y qué pasó? Que empezó a entrar tal aluvión de pedidos para ese momento que alucinamos, esa campaña tuvo muy buena acogida, nos llegó muchísimo feedback por parte de la gente que nos seguía y fue muy bonito. El éxito de esa primera campaña de vuelta al cole fue lo que nos animó también a seguir trabajando, también estábamos empezando a conocer nuestras temporadas de ventas por producto, porque el primer año no tienes estadísticas ni tienes datos con los que comparar. Ahí fue cuando nos dimos cuenta del volumen que estaba cogiendo el proyecto.
El segundo momento fue el año pasado antes del confinamiento, en el mes de febrero nos invitaron a una charla en el Paraninfo de la Universidad de Alicante delante de 900 personas, para contar la experiencia como emprendedoras y cómo había sido el proceso para crear Abiebrown. Estuvimos media hora de charla con 900 chicos de instituto, lo que para nosotras fue todo un reto porque están en una edad en la que se distraen mucho y no es que fueran a escucharnos a nosotras, si no que nosotras participamos en unas jornadas orientadas a ellos. El mayor reto fue descubrir cómo captar la atención de unos chicos que quizá ni siquiera están pensando en emprender. Creo que nuestra intervención tuvo muy buena acogida y que a la gente le gustó mucho conocer nuestra experiencia. El hecho de hacerlo además en el escenario donde nos habíamos graduado, donde habíamos finalizado nuestras carreras y volver como ponente ante todo el salón de actos con tanta gente, yo creo que fué un hito para recordar en la historia de Abiebrown.
¿Cómo definiríais el éxito?
A: Para mí el éxito es irte por la noche en la cama con una sonrisa, ése es el éxito. El «he trabajado más o menos» o «he conseguido esto y lo otro, pero estoy contenta» Puede que el éxito al principio fuera he vendido mi primer cuaderno y ahora sea que he vendido 20.000, pero el éxito es irte contento a la cama con lo que estás haciendo.
C: También sentir que estás trabajando pero también lo estás disfrutando. No es como en un trabajo normal en el que tienes que cumplir de tal hora a tal hora y estás deseando que llegue la hora de llegar a caso, no, es el hecho de que se te pasa la mañana volando porque estás disfrutando, estás haciendo lo que te gusta.
¿Habéis tenido que renunciar a algo para alcanzar ese éxito?
A: Sí, a muchas cosas. La primera a la salud y es algo que ahora nos damos cuenta que es algo a lo que no hay que renunciar. Si tú no tienes salud el proyecto no puedo ir para adelante, tú mismo no tienes energías. A amigos también, porque mucha gente no entiende que yo un sábado a lo mejor por la noche tengo que estar aquí, porque estoy en plena campaña de vuelta al cole. O se quieren ir de viaje en pleno agosto y yo no me puedo ir porque yo estoy en mi temporada alta. Salud, amigos, obviamente a la familia, muchas veces tienes que decir que no a comidas o a quedadas porque tienes una cantidad de trabajo que solo tú puedes sacar.
C: Suscribo, estoy de acuerdo.
A: Y a tiempo personal, porque aunque nos gusta y es nuestro hobby, le dedicamos muchas horas al proyecto y al final siempre te falta un poquito más de tiempo para otras cosas.
¿Cómo recomendáis vosotras entonces buscar ese éxito?
A: Hay que buscar el equilibro entre dedicarle muchas horas a la empresa, porque sin eso es imposible que funcione, pero sin olvidarte de todo lo demás. No olvidarte que tienes que descansar, que tienes que desayunar tranquila, siéntate y desayuna, ahora contestaras ese email, que no puedes dejar a tus amigos y a tu familia de lado porque al final son los que te están apoyando… deja 10 minutos los emails, que no se van a ir de allí, y vete a tomar ese café con tu amiga que te necesita ahora, no te necesita mañana, te necesita ahora.
C: También no querer llegar corriendo a la menta, dar pasos realistas intermedios y en esos pasos realistas basados en lo que es un día, no te satures de tareas, ponte tareas viables porque sabes que a lo mejor todas no te va a dar tiempo para cumplirlas. Que en esa programación saques tiempo para descansar, para hacer deporte, porque cuando todo eso está equilibrado es cuando tú das de ti para seguir. Y sobre todo seguir de forma productiva porque no eres igual de productivo todo el día, y el querer abarcarlo todo no implica que vayas a llegar a todo.

¿Cuál es vuestro mayor miedo como empresarias?
A: Yo tenía miedo de estancarme, de no saber por dónde seguir. Dentro de que tenemos muchos proyectos que llevar a cabo de manera física y muchos productos por lanzar, todo lo demás. Por dónde sigo con la programación de la web, las campañas publicitarias se han estancado un poco, ¿qué puedo hacer que sea novedoso?, el cómo está cambiando el tema de las redes sociales… Mi miedo siempre ha sido estancarme, el no saber por dónde continuar con ciertos temas.
C: Yo creo que he adquirido un nuevo miedo también del pasado año a este, que es la situación económica, el cómo la situación económica general nos va a influir en el proyecto. Al final el mercado laboral influye en la economía, si la gente no tiene trabajo, no tiene paro o medios económicos, ¿yo cómo voy a llegar a la gente? Cómo lo externo puede afectar a nuestro proyecto.
¿Cómo gestionáis ese miedo?
A: Me he apuntado a un montón de cursos, porque mi miedo viene de algo muy sencillo que es que necesito formarme. La universidad te forma hasta un punto, pero a partir de ahí el resto lo tengo que aprender yo, y es posible que necesite que alguien me ayude porque mi autoconocimiento ya no da para más. Así que me he apuntado a muchísimos cursos porque necesito seguir formándome y es algo que todo emprendedor no debe olvidar nunca, que hay que seguir formándose continuamente. Este año estoy intentando solucionar mi miedo viendo qué haría a través de la formación para dejar ese miedo atrás.
C: También es importante saber qué información escoges, es decir, qué información dejas que llegue a ti en el día a día porque tampoco te puedes saturar con todo lo que llega a través de los medios. Protégete a ti mismo de todo lo que escuchas y ves al día para que eso tampoco pueda con tus emociones, realmente te tienes que centrar en ti, en mantenerte lo más alto posible, cuidándote, descansando, creyendo en lo que haces, formándote, distrayéndote, escuchando música, buscando esos momentos también agradables en tu día.
Pensad un momento en los errores que más habéis lamentado a lo largo de los años, si tuvierais que escoger uno especialmente negativo, ¿cuál sería?
A: A mi me viene uno a la mente especialmente negativo, hace 2 años la sensación que yo tuve es que el negocio iba muy rápido y nosotras no dábamos abasto, era imposible, ni siquiera delegando tareas externas. Entonces intentamos buscar a alguien que nos ayudara, y creo que elegimos el ámbito en el que menos teníamos que elegir, buscamos una agencia publicitaria que se encargara de parte de la comunicación de la empresa y de las campañas publicitarias: Google, SEO, etc. ¡Somos publicistas las dos!, fue un error de libro, porque la comunicación es algo que además nos gusta, comunicamos algo que adoramos y yo creo que nadie más puede transmitir ese amor por tu producto mejor que tú. Fue un error intentar buscar ayuda en un ámbito que quizá no era el correcto.
C: Otro error puede ser la falta de previsión en ciertas ocasiones. Por ejemplo, que te encuentres con roturas de stock en un momento que realmente lo necesitas y luego tienes que dar la cara frente a tus clientes, para avisarles del retraso. También es verdad que conforme nosotras tenemos planteado el proyecto hemos ido mejorando muchísimo el control del stock, pero es una locura cuando das tantas posibilidades de personalización de los productos, en un momento dado viene una ola porque se pone de moda un producto concreto y te lo quitan de las manos y tú tienes que depender de tus proveedores, tienes que tener en cuenta que los proveedores con los que trabajas también trabajan con unos tiempos determinados. Quizás en algunos momentos puntuales un error nuestro ha sido la falta de previsión.
Si volvierais a empezar de cero, seguiríais el mismo camino o cambiaríais algo?
A: Yo creo que prácticamente sí, seguiríamos el mismo camino.
C: Totalmente.
¿Dónde os veis dentro de 3, 5 y 10 años?
A: Me gustaría verme más segura en las decisiones profesionales que tomo en cualquier ámbito de los que yo me encargo. De aquí a diez años, delegando muchas de las tareas que hago ahora.
C: Yo diría también que con el control del tiempo, sabiendo distinguir qué partes del tiempo son para el trabajo, qué partes del tiempo son para el cuidado personal y para el descanso, qué partes del tiempo son para ocio. En 3 años tener totalmente gestionado el tiempo, el tiempo en sagrado y hay una estructura de tiempo que no puede variar. Luego también el delegar, el aprender a delegar, el aprender que no puedes controlarlo todo tú, que también tu proyecto está creciendo y requiere de más manos, cómo empezar a incorporar gente al equipo y saber gestionarlo, también saber externalizar y buscar cómo como externalizar un tipo de tareas para que no nos pase como el caso anterior del año pasado, de delegar algo que realmente no era lo que teníamos que delegar.
¿Dónde veis Abiebrown dentro de 3, 5 y 10 años?
A: En 3 años me imagino agobiada porque aquí hay gente trabajando y ya no cabemos más, empieza a haber muchas cajas (de hecho nos hemos cambiado varias veces de oficina porque empezaron a quedarse muy pequeñas) y me imagino en ese momento otra vez existencial (en nuestra oficina actual llevamos dos años) de aquí ya no cabe nadie más, hay que hacer algo. De aquí a 10 años me imagino en un polígono, con una fabricación más grande, exportando al extranjero, con venta en otros sitios.
C: Yo lo veo con nuevas líneas de negocio que no hemos tocado todavía, por ejemplo planificación para nuevos sectores.
A: Yo veo muchas opciones de personalización que ahora no tenemos, por un lado porque nosotras ya no damos a basto a personalizar tanto la agenda y los cuadernos, y por otro porque la web necesita mucho mantenimiento informático para poder ofrecer todas esas opciones al cliente, y es algo que queremos hacer.
C: También productos en otros idiomas para poder vender a otros países.
A: Eso nos obliga a duplicar toda la fabricación, es algo que queremos hacer desde hace tiempo pero aquí en la oficina no cabría toda la producción que tenemos duplicada en otros idiomas, haría falta una nueva oficina o incluso un almacén en destino para ahorrar tiempos de envío.
¿Podríais darme alguna recomendación para los nuevos emprendedores?
A: Yo creo que uno de los miedos que nosotras teníamos al principio es aquello que te dicen de «es que en tu nicho de mercado ya hay muchas empresas». Si van a emprender en un sector en el que ya hay muchas opciones, incluso empresas conocidas, que no tengan miedo, si creen en su producto y buscan esa pequeña diferenciación respecto al resto, es suficiente para hacer sus sueños realidad. Entonces que no tengan miedo a que su nicho de mercado ya haya otras empresas conocidas, porque al final lo importante es ofrecer su diferenciación.
C: Que intenten intenta convertir su proyecto en su hobby, dicen que cuando te dedicas a lo que te gusta no trabajaras ni un día más de tu vida ¿no? Es verdad que eso tiene detractores también porque le echas muchísimas horas, no es que no trabajes, pero sí que es verdad que es como comentaba antes, que sientes como que se te pasa el día volando y es en realidad porque lo estás disfrutando. Entonces que crean en el proyecto, que lo disfruten y que sean constantes.
Si tuvierais que completar esta entrevista, ¿qué pregunta os gustaría que os hubiera hecho?
A: ¡Qué pregunta más bonita!
C: ¿Eres feliz?
¿Sois felices?
C: Sí, sí que lo somos. Todo el trabajo que hacemos y el esfuerzo que realizamos tiene una gratificación por parte de ese cliente que te escribe y te dice que qué bien le ha venido ese producto, por parte de ese cliente que te dice que te acaba de conocer pero que le ha encantado y va a volver a repetir, el cliente que te dice que lo ha regalado y ha sido un éxito, que le ha encantado a la persona destinataria. Realmente tenemos mucho apoyo por parte de la comunidad y eso nos hace ser felices porque algo que has creado tú, que ha salido de tu cabeza, esté dando sus frutos, y tener una comunidad bastante fiel en ese sentido, contribuye bastante a nuestra felicidad.
A: En ese sentido también justo hoy ha llegado el mensaje de una chica que nos comentaba que gracias a que tenía su proyecto organizado con nuestra agenda ha podido llevar a cabo que llevaba años queriendo hacer. Esa satisfacción de pensar que estoy ayudando a alguien… Vale que esto es un negocio y yo tengo que facturar, pero ¡mi producto ayuda a la gente! Hace unos años sacamos el planificado saludable y hay gente a la que le está viniendo bien para organizarse la comida, porque tiene un problema de alimentación y necesita verlo por escrito, porque tiene un proyecto de perder peso o ganar peso… El saber que estás ayudando a alguien en su salud emocional, en su salud física, en sus proyectos personales, es muy gratificante.







